La FAA advierte que podrían aumentar los incidentes
Según lo advirtió la FAA a las aerolíneas a través del Sistema de Información de Seguridad Aérea de la NASA, es probable que en los próximos meses se produzca un aumento considerable de los incidentes incluidos los “tailstrike”, además de otros incidentes.
Con los aviones medio vacíos por culpa de la pandemia del COVID-19 ya sea por el distanciamiento social implementado de forma voluntaria por parte de las aerolíneas o por la baja demanda, se está produciendo un aumento de incidentes ocasionados por los aviones demasiado livianos.
Entre los incidentes más comunes que se han reportado, están aquellos relacionados con aviones que han realizado ascensos a demasiada velocidad, varios centros de control de los EEUU han reportado aviones que han subido por encima de su altitud máxima autorizada, sobre todo, en los primeros tramos del ascenso después del despegue. Los pilotos han confirmado este hecho, alegando que las aeronaves están demasiado ligeras y ascienden mucho más que en otras ocasiones.
Otro incidente hecho público, esta vez por la FAA, ha sido el de un vuelo que no había presentado toda la documentación, debido a que el embarque fue demasiado rápido por la poca cantidad de gente. La FAA también advierte que se han retrasado muchos entrenamientos y cursos de refresco de las tripulaciones de vuelo, por lo que estas podrían no tener la formación necesaria para afrontar los vuelos, estos retrasos en los cursos se deben presumiblemente, a que a finales de septiembre podría haber una ola de despidos en las aerolíneas norteamericanas, dado que se termina el plazo de vigencia de la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica del Coronavirus (CARES), con lo cual las compañías ya podrán despedir a sus empleados, cosa que es de esperar que suceda, ya que se considera que se necesitarán hasta 3 años para recuperar el volumen de demanda de vuelos previos a la crisis.